Un gama media más refinado

Si comparamos el Xiaomi Redmi Note 12 con el Redmi Note 11, el cambio es bastante obvio en su diseño. Aquí Xiaomi apuesta por los bordes planos y colores pastel que quedan bastante aparentes, aunque ya sabemos que esto de los bordes planos no es algo que guste a todo el mundo. Lo que se mantiene plana es la pantalla.

Se trata de una pantalla AMOLED de 6,67 pulgadas de diagonal que sube la velocidad de refresco hasta los 120 Hz. Esta pantalla tiene resolución Full HD+, unos 700 nits de brillo típico y acoge a la cámara frontal perforada en el centro.

Para la fotografía, el Xiaomi Redmi Note 12 monta una cámara frontal de 32 megapíxeles, mientras que detrás simplifica la apuesta un poco con respecto a la generación anterior. Aquí tenemos una cámara triple con sensor principal de 50 megapíxeles, un gran angular de 8 megapíxeles y una lente macro de 2 megapíxeles.

En cuanto al procesador, pasamos del anterior Snapdragon 680 al Snapdragon 685, con un rendimiento entre el 10% y el 15% más que su antecesor. En memoria y almacenamiento, hay para entre 4, 6 y 8 GB de RAM y 64 o 128 GB de almacenamiento.

El Xiaomi Redmi Note 12 monta una gran batería de 5.000 mAh que soporta carga rápida de 33W (con el cargador en la caja), tiene el lector de huellas en un lateral, minijack, IR Blaster y se pone a la venta con MIUI 14 basado en Android 13.